Sobre mi

¡Hola, soy Alein! Vivo en Colombia aunque usualmente permanezco en los mundos de diversos libros, y ahora, he decidido comentar aquellos libros, dementes, de los que se llevan tu cordura por momentos y que, al tiempo, son muestras de mentes maravillosas. ¿Quieres acompañarme? Azul. Los mejores libros son para mí, aquellos que te hacen cuestionar la realidad, tu vida, tu futuro. The 1975. París. Come-libros profesional. Homo sum, humani nihil a me alienum puto. Escritora de versos. Fotógrafa aficionada. Palomitas dulces. Helado de cereza y pistacho. Afortunada de tener una variedad de tipografía para escribiros, pues mi letra real es tan legible como los jeroglíficos. ¡Saludos marcianos!

Reseña: Mindhunter


¿Un poco de misterio, penumbra, zozobra, intriga y miedo? Todo esto es más oscuro cuando viene del interior del ser humano. Como si aquellos actos nos recordaran aquello que podemos ser, en lo que también podemos convertirnos. 

 Las series criminales, policíacas, basadas en historias reales de hechos medrosos y aturdidores siempre acuden a mi -o yo acudo a ellos- como el eterno cazador al asecho de su presa. Y es que, me es irremediable admitir que ¡me fascinan todas estas historias!

Mindhunter no es la excepción. 

Una serie sobre psicópatas + de alguna manera basada en eventos reales + una ambientación casi ochentera + teorías, giros inesperados e intriga = UNA SERIE PARA OBSERVAR EN MARATÓN POR MUCHO TIEMPO.

De la mano de directores como David Fincher, Asif Kapadia o Andrew Douglas, Mindhunter es una serie que consigue extraer el lado más suspicaz de cualquiera que la observa, y poner al espectador en el juego inteligente para descifrar el código más secreto del ser humano: Su Mente.  

La serie abre y saca a la luz, datos que pueden ser poco conocidos para los espectadores, pero más allá, es una serie que logra suscitar emociones al ahondar en los temores que todos -como miembros de una sociedad- hemos experimentado alguna vez: ¿Podría alguien llegar a cometer tales crímenes? ¿Cómo lidiar con estos hechos? ¿Podría ser yo, algún criminal? ¿Podría ser yo una víctima? o ¿Cómo poder escapar y brindar justicia?

Bien sea por haberlo vivido una experiencia atroz o al menos, por el hecho de escucharlas a diario en las noticias, Mindhunter logra, a través de noticias criminales, enganchar con el público de cualquier edad -aunque no para niños jaja- "porque nadie está exento de" o por el hecho de que a todos de alguna manera nos interesa el morbo y logra, a mi parecer, de manera espectacular, contarnos lo difícil del trabajo policial. Pues aunque sean muchas las veces en las que los criminales se llevan el crédito e inundan las pantallas, son los oficiales quienes han pasado días enteros de agotamiento en búsqueda de un rastro, un punto de quiebre para alcanzarlos. 

Es interesante encontrarse con historias que permiten ver las dos vías que usualmente acontecen para un mismo evento, así como la amplia variedad de situaciones que nos llevaron a establecer las normas y percepciones de justicia que tenemos ahora, así como los temores que tenemos hoy en día. Mindhunter es especial porque, de alguna u otra manera, se las arregla para presentar la inmensa posibilidad de factores que inciden para que la vida -y la historia- sea como la hemos vivido, y no se enfrasca en limitar los hechos hacia una sola visión, sino que, deja a primera plana expuesto, que el mundo es un lugar complejo. Tanto para las víctimas, los espectadores, los investigadores, como para los criminales.

La segunda temporada busca explorar aún más todas estas facetas, mostrándonos de forma más calmada -muy calmada para mi gusto- cómo este tipo de trabajos parecieran robarnos nuestras propias vidas, la dificultad de mantenernos alejados, permanecer a distancia de estas situaciones solo para mantener un poco la cordura y un poco de salud, aunque pareciera casi imposible. La serie abarca puntos fundamentales y avanzamos en la consolidación de algo innovador, aunque me decepcionó un poco el ritmo tan lento, los silencios innecesarios o las escenas tan poco productivas para la historia narrada, por lo que solo espero que mejore, pues las sensaciones arrasadoras de la primera temporada no pueden disiparse solo así con una segunda temporada que baja los estándares. 

Sin embargo, debo de seguir recomendandola, pues es una serie corta pero sustanciosa. Con personajes definidos y muy  singulares, tiene un terreno amplio que abordar y que ¡sigue dejándonos con las emociones al borde! No me canso de repetir la primera temporada, -la mejor a mi gusto- y de temer un poco con la segunda -pues enseña que la fragilidad humana tiene otras versiones- y no puedo aguardar a tener noticias de una temporada próxima. Quiero muchos más casos, así como mayor intriga, por ello, solo puedo prepararme mentalmente para el gran embrollo que tendré tratando de resolverlos. ¿Qué piensas tú?

Cómo la puntúo
Mis personajes favoritos fueron Debbie y Bill, aunque me encanta lo intrépido y astuto que es Holden. ¿Cuál es el suyo?